13 de julio de 2017

Antártida: Iceberg y musgos

¡Hola a tod@s!


     La antártida está reverdeciendo con un manto de musgo que se está extendiendo y con él la vida que lo habita. Las briofitas favorecen el aumento en la cantidad y diversidad de protistas (amebas) y de bacterias. Según Matthew Amesbury, geógrafo de la Universidad de Exeter (Reino Unido): "Los bancos de musgo crecen a lo largo de toda la península, entre los 60º y los 69º sur, y algunos tienen más de 4.000 años de antigüedad, por lo que ofrecen un registro continuo sobre una amplia zona". Este geógrafo ha constatado que desde 1950 se ha producido un crecimiento vertical del banco de musgo, un aumento de su masa vegetal y una expansión horizontal de la cubierta vegetal generada.

Banco de musgo en una ladera de Green Island, en el extremo de la península antártica. / MATT AMESBURY
    En la región occidental de la antártida el deshielo se está acelerando debido al cambio climático. "En la segunda mitad del siglo XX, la península Antártica fue una de las regiones del planeta donde se aceleró más el calentamiento, con aumentos de la temperatura de cerca de 0,5º por década", recuerda Amesbury. "En ese mismo periodo de tiempo, nuestros resultados muestran grandes cambios, como un aumento entre cuatro y cinco veces del ritmo de crecimiento del musgo y el incremento de las poblaciones microbianas". 
     Dan Charman, colega de Amesbury en Exeter sostiene que si la temperatura sigue subiendo y con la superficie libre de hielo en aumento por la retirada de los glaciares, "la península Antártica será un lugar mucho más verde en el futuro".
 Utilizando alrededor de 250 millones de mediciones tomadas por la misión CryoSat de ESA entre 2010 y 2016, los científicos del Centro de Observación y Modelado Polares del Reino Unido han generado una vista 3D única de la Antártida.

Antártida. ESA. CPOM

 El iceberg A68 se ha desprendido esta semana desde la plataforma Larsen C de la Antártida. Se trata de uno de los diez mayores iceberg registrados aunque lejos del iceberg B15 separado en el 2000 de la plataforma antártica Ross con 11000 km2 y cuyos fragmentos llegaron a Nueva Zelanda en 2006. La grieta en la plataforma de hielo, que llevó al nacimiento del iceberg A68, fue monitoreada de cerca usando imágenes de radar de los satélites Copernicus Sentinel-1. La misión CryoSat de la ESA se ha utilizado para medir el espesor del iceberg: en promedio, tiene 190 m de espesor, pero en su punto más grueso tiene una quilla 210 m por debajo de la superficie del océano y contiene aproximadamente 1155 km2 de hielo. Su peso es de un billón de toneladas. Los fragmentos que genere
no se desplazarán ni muy rápido ni demasiado lejos a corto plazo, pero los científicos seguirán muy de cerca su evolución ante la posibilidad de que los vientos y la corrientes le empujen hacia el norte, donde puede convertirse en un peligro para la navegación.
CryoSat reveals iceberg. ESA. University of Edinburgh–N. Gourmelen

No hay comentarios:

Publicar un comentario